Existen palabras que no tendrían que ser dichas nunca, existen pensamientos que no se tendrían que hacer notar, y hay cosas que nunca se tendrían que decir. Hay fechas claves, que en cierto momento parecen muy lejanas, y cuando queres acordarte las tenes enfrente de tus narices. Creo que faltan alrededor de 62 hs, o menos, o más quizá. Son de esos días que mejor que nunca lleguen, ¿para qué? ¿para revivir cosas que no quiero? ¿para hacerme acordas que ese día? (maybe nunca se me olvide). Existen momentos en tu historia que no queres repetir, y otros por los cuales darías la vida solo por volver a sentir. Cientos de personas caminando a tu alrededor, cientos de miradas cruzándose, y nunca notaste que solo una iba a cambiar tu vida (o solo los próximos meses, como quieras). Que pocas probabilidades que había, como fui a caer en la más incierta. Horas, días, minutos, semanas, cuanto que pasó, que rápido. Y pensar que siempre volvíamos a ese día a recordar como había sucedido, hoy me produce una sensación extraña imaginarlo.
Cosas de la vida llevan a que hoy no podamos compartir eso nuevamente, nose si para bien o para mal. Cosas de la vida, vueltas, el nombre que quieras ponerle, nos traen hoy acá, a la distancia y el olvido, que por un lado hace bien, y por el otro me hace entender que esa parte del corazón no late, murió y quedo donde nadie va a sentirlo jamás.
Extraño pero predecible, turbio, insignificante en tu vida, lo contrario en la mía. Grande y chico, felicidad, deseo, que tengas todo lo que no te supe dar.